Instantaneas

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martes, 12 de mayo de 2015

XVI - Feralas, el infierno verde

   Tanto Pheiner como Snotling resistieron el brutal asalto gnoll, oleada tras oleada y las fuerzas pronto se les escaparían de continuar asi. Snotling sintió una punzada en el corazón, hincando las rodillas y casi derrumbándose; sus ojos brillaron de un intenso color rojo, el ansia de sangre viajaba por sus venas y arterias dotando de adrenalina a sus músculos y entonces gritó de tal forma que los gnolls se quedaron petrificados en el sitio. Pheiner observó como el orco miraba con una rabia contenida y emanaba un terror antinatural, en ese momento un gnoll que estaba demasiado cerca estalló dejando una masa sanguinolenta manchando de sangre todo a su alrededor. Snotling movido por ese ansia de sangre cargó contra los aterrorizados gnolls mientras hablaba en un lenguaje antiguo, algo que estremeció a Pheiner al oírle, ya que según aprendió de los boticarios era un lenguaje hablado en Rasganorte y perdido hace muchísimo tiempo.
   Una vez muertos los asaltantes, Snotling volvió a la calma y en ese momento Pheiner aprovechó para hablar con él:

Pheiner: "Snotling, algo no me gusta en lo que ha pasado. Eso que dijiste hace un momento es un lenguaje olvidado y que se habla en las profundidades de Rasganorte, Es preciso que viajes a Pandaria y encuentres a Bloodjol.
Snotling: "Parece que esa isla es mi siguiente destino. Llevo mucho tiempo así, desde que volví de Rasganorte y parece que el fragor de la batalla me da fuerzas donde antes no me pasaba. No se si sera bueno o malo pero se que debo hacer."
Pheiner: "Por mi no te preocupes, al estar ya muerto paso mas desapercibido." -ríe de forma malvada.

  Snotling se dirigió entonces hacia el sur, para llegar a las montañas que separan Feralas de Silithus, el gran desierto donde los quirajis tienen sus construcciones y en donde el Dios Antiguo C'thun provocó el caos en el pasado. Cuando estaba cerca viró hacia el Este para dirigirse hacia Tanaris, desde donde intentaría coger alguna embarcación que se dirigiera hacia el continente llamado Pandaria.

   En algún lugar entre las montañas de Trabalomas, se encuentra una mansión pero no es una casa cualquiera ya que es el hogar de los Ravenhold. Esta casa desciende de la nobleza que existió en el cercano reino de Alterac pero que fue devastado y aniquilado en las diversas guerras. Nadie sabe de su existencia excepto unos pocos privilegiados fuera de su secreto circulo.
  En uno de sus salones, se encuentran varias figuras en donde tienen un acalorado debate, ya que trata sobre nuestro chaman. Están preocupados por los secretos guardados en el chaman y sobre todo el ente que tiene en su interior; saben que tienen que hacer algo pero no saben bien el que ya que en Ravenhold hay todo tipo de miembros de la Alianza y de la Horda, solo que en la mansión dejan de lado sus hostilidades.
  Después de varios días debatiendo, deciden que mandaran a un miembro a seguir y recopilar toda la información posible sobre este extraño caso. Este miembro es conocido como Thaip, aunque nadie sabe si es su verdadero nombre o algún tipo de mote o alias.

  Snotling después de viajar hasta Tanaris, encontró un barco que se dirigía a Pandaria con un elevado número de goblins en busca de negocios con los habitantes locales. Semanas después el barco llegó a Pandaria sin rumbo estrellándose contra los acantilados de la parte norte de la isla; entre los restos se ven los cadáveres de los tripulantes y una figura sombría que camina lentamente sobre las olas del bravío mar adentrándose en Pandaria.